La materia de Biología Molecular aplicada a la agricultura se adentra en los principios moleculares que sustentan el mejoramiento genético, la resistencia a plagas y enfermedades, así como la optimización de cultivos para incrementar la productividad agrícola. Se exploran las técnicas y herramientas de la Biología Molecular, como la ingeniería genética, para modificar genéticamente plantas con el objetivo de obtener características deseables, como mayor resistencia a condiciones adversas, mejor calidad nutricional y rendimientos más eficientes. Esta disciplina proporciona una base sólida para comprender cómo la manipulación molecular puede contribuir significativamente a la sostenibilidad y eficacia en la producción de alimentos.